Uno de los problemas respiratorios más comunes en niños son los resfriados, que a priori no suponen un problema grave de salud, pero que en ocasiones se pueden llegar a confundir con otras patologías que sí pueden ser graves, o por lo menos a tener en cuenta. En este sentido, hablamos con la Dra. Eglee Díaz Hernández, pediatra en IMED Elche, especializada en alergología y neumología que nos explica en profundad cómo detectar algunas enfermedades respiratorias como el asma o la bronquitis.
“Lo casos más comunes que atendemos son resfriados comunes, gripes, bronquitis, bronquiolitis laringitis, asma, alergias… y en el peor de los casos, neumonías”, dice la doctora. Sin embargo, en los meses de verano, no hay tanta incidencia de este tipo de virus por el aumento de las temperaturas. “Es sabido que los virus con el frío se propagan”, asegura.
¿Cuándo hay que llevar a los niños al neumólogo?
Generalmente, los niños y niñas que acuden a la Unidad de Neumología son los que en primer nivel de pediatría no han sido resueltos. “Un resfriado común no suele llegar al neumólogo. Llega el niño que tiene resfriados a repetición, o tos repetitiva, o se cansa a menudo, le cuesta comer, se pone morado. O también pacientes con asma diagnosticada que son difíciles de tratar”, explica la Dra. Eglee.
Síntomas que puede preocupar a padres y madres
Para muchos padres o madres, no siempre es fácil distinguir qué problema tienen sus hijos. Sobre todo en patologías respiratorias que pueden presentar síntomas parecidos. En este caso, la Dra. Eglee insiste en sus comportamientos.
“Dificultad respiratoria que no mejora, niños que se les escucha ‘pitos’ en el pecho, que nosotros llamamos sibilantes, que los padres pueden escuchar cuando duermen, cuando comen o corren. Dolor en el pecho, que se cansen mucho cuando juegan. O si se ríen mucho, se cansan y empiezan a toser…”
En cuanto a la tos persistente, insiste en que es uno de los síntomas mas frecuentes tanto en verano como invierno, y por lo que más pacientes suelen acudir a consulta.
Asma infantil
El asma infantil es una patología que según la Dra. Eglee tiene dos enfoques distintos: “Por un lado, está el niño con una crisis asmática que está en un momento de urgencia y tiene que acudir al hospital para un tratamiento urgente que mejore sus condiciones. Y después está el niño que tiene asma en ciertas ocasiones al año que hay que categorizarlo, estudiarlo, hacerle pruebas de función pulmonar, un historial clínico… Este niño, ya fuera dela gravedad, valorar los síntomas que tiene, y aplicarle un tratamiento.
Cómo diferenciar un resfriado común de una enfermedad respiratoria más grave
No hay nadie mejor que le los padres para saber cómo se encuentran los niños, y muchas veces desde el sentido común se puede evidenciar la gravedad de alguna de las patologías comentadas anteriormente.
“Con el resfriado común, vamos a ver a un niño en buenas condiciones que puede comer, pero está un poco ‘malito’, con mocos, puede tener fiebre controlada, dolores musculares, no tiene ganas de jugar… en definitiva, decaído.
Sin embargo, al niño con dificultad respiratoria, que le cueste respirar cuando esté acostado, que no pueda comer adecuadamente, o que no pueda correr, o cumplir con su rutina. En estos casos, es recomendable acudir a los especialistas”, aconseja la Dra. Eglee.
